Nanopartículas biológicas que actúan como mensajeros celulares, capaces de estimular y modular distintos procesos regenerativos en la piel. Derivados de fuentes biotecnológicas altamente purificadas, los exosomas contienen factores de crecimiento, proteínas y ARN mensajeros que favorecen la reparación, hidratación profunda, mejora de la textura cutánea y disminución de signos de envejecimiento.
Este tratamiento no aporta volumen ni es considerado invasivo. Su enfoque está en la bioestimulación, la regeneración celular y la restauración del equilibrio funcional de la piel. Es especialmente útil en pacientes con piel fotoenvejecida, deshidratada, desvitalizada o como complemento a otros procedimientos estéticos.
a. Mejora de calidad de piel en rostro, cuello y escote
b. Tratamiento de manchas y tono desigual
c. Reducción de poros dilatados
d. Disminución de arrugas finas y líneas de expresión
e. Post-tratamientos como láser, peeling o microneedling para optimizar la regeneración
f. Pieles inflamadas o sensibilizadas por tratamientos previos
Cada piel tiene necesidades únicas. Para determinar el valor del tratamiento, es indispensable realizar una evaluación personalizada considerando las caracteristicas clínicas del paciente para indicar el protocolo adecuado.
Los resultados son progresivos. Desde la primera sesión es posible percibir mejoras en la hidratación y luminosidad, pero los cambios más notables en textura, firmeza y uniformidad de tono se observan habitualmente a partir de la segunda o tercera sesión.
No. Es un tratamiento mínimamente invasivo. Puede haber un leve enrojecimiento o sensación de calor local que desaparece en pocas horas. Aun así, se sugiere agendar tu cita al menos una semana antes de un evento importante si vas a
No. Al igual que muchos tratamientos regenerativos, los efectos de los exosomas son temporales y dependen del protocolo aplicado y de la respuesta biológica individual. Se recomienda realizar sesiones de mantención cada 4 a 6 meses, según evaluación profesional.